Los gatos son animales increíblemente ágiles y flexibles, capaces de escapar ilesos de caídas que resultarían fatales para muchos otros animales. Sin embargo, no son invulnerables y las caídas desde ciertas alturas pueden provocarles graves lesiones.
Con el fin de que puedas prevenir una caída que pueda lastimar a tu felino, te dejamos con un artículo sobre las caídas más peligrosas para tu mascota y qué es lo que debes hacer para prevenir este tipo de accidentes.
La supervivencia depende de la velocidad, no de la altura
A diferencia de los humanos, los gatos carecen de clavículas. Esto les proporciona mayor flexibilidad y les permite girar sus cuerpos en el aire para caer de pie. Además, poseen un oído interno muy desarrollado, con un órgano del equilibrio que detecta cuándo están cayendo a gran velocidad.
Cuando un gato alcanza los 90 km/h de velocidad en caída, su órgano del equilibrio se activa. Esto ocurre generalmente al caer desde un quinto piso o superior. El gato puede entonces girar su cuerpo y preparar sus extremidades para el impacto. Esta velocidad está muy cerca de la velocidad terminal de caída de un gato estándar, que es de 97 km/h (frente a los 197 km/h que puede llegar a alcanzar un humano).
En caídas de menos de 3 metros, el gato no alcanza la velocidad necesaria para que se active este mecanismo de supervivencia. De hecho, las caídas cortas pueden llegar a ser más peligrosas que las largas. Concretamente, hay buena historia clínica de gatos que han fallecido o han quedado con graves lesiones tras caer de alturas inferiores a los 9 metros. Se dice que, para un gato, es más mortal una caída desde un primero que desde un quinto.
¿Cuál es la altura máxima?
Cada gato es un mundo. Y por supuesto, mejor no experimentar. Se conocen casos de gatos domésticos que han llegado a sobrevivir a caídas de hasta un quinto piso. La supervivencia también va a depender de otros factores, como la musculatura, la raza o el peso del propio animal. Si el gato está obeso, las posibilidades de que sobreviva a una caída de una altura considerablemente alta son muy bajas.
Tirando un poco de historia, el caso más espectacular que hay registrado es el de un gato de Boston que sobrevivió a una caída de 19 pisos, allá por el año 2012. No obstante, no se puede afirmar que cualquier michi vaya a correr la misma suerte que ese. Más aún, cuando se conoce de sobra lo peligroso que es el síndrome del paracaidista en felinos.
Lesiones típicas tras grandes caídas en gatos
Llegamos a la parte más triste. Aunque los gatos tengan adaptaciones para amortiguar las caídas, no son inmunes a lesiones graves o mortales. Caídas de gran altura pueden provocar estas afectaciones:
- Sangrados por nariz y boca: la fuerza del impacto puede hacer que los delicados vasos sanguíneos de la nariz y boca se rompan, causando hemorragias que pueden incluso causar la muerte del animal.
- Daños internos como roturas de bazo o vértebras: los órganos internos como el bazo son muy susceptibles a lesiones por aplastamiento. Las vértebras también pueden fracturarse por la sacudida.
- Politraumatismos que los dejan inválidos: las múltiples lesiones y fracturas ocasionadas por una caída severa pueden incapacitar permanentemente la movilidad y calidad de vida del gato.
Prevenir el síndrome del paracaidista. La clave
Para evitar que nuestro animal pueda hacerse daño por un accidente, hay que tener ir con mucho cuidado. Sigue estos consejos básicos para prevenir caídas:
- No dejar a los gatos sin supervisión en terrazas o balcones. Estos lugares sin protección son muy peligrosos, por lo que deben explorarse bajo estricta vigilancia.
- Instalar mosquiteras en ventanas accesibles: las mallas mosquiteras impiden que los gatos salten por las ventanas, a la vez que permiten la ventilación del hogar.
- Mantener el mobiliario alejado de ventanas y balcones: los gatos trepan y se sientan en muebles junto a bordes, por lo que es mejor mantener una distancia prudencial para evitar accidentes.
- Colocar redes de seguridad: unas redes bien instaladas en terrazas y balcones pueden atrapar al gato si se cae y van a evitar una tragedia.
