Tanto si tu gato es adulto como si es un gatito pequeño, hay una gran probabilidad de que sea fan de morder cosas. Puede que sea porque está echando los dientes, o puede simplemente que sea un comportamiento suyo. Cualquiera sea la razón, un juguete mordedor es una gran forma de entretener a nuestra mascota y proteger los otros objetos que hay por la casa de sus temibles dientes.
¿Qué puede morder mi gatito mientras le salen los dientes de leche?
Cualquier cosa que pueda acabar en la boca de tu pequeño gatito debe pasar por un control de seguridad. Aunque parezca mucha responsabilidad, la buena noticia es que hay muchas cosas de andar por casa que puedes darles para que muerda a gusto.
Materiales como trozos de tela limpia, papel y cartón, son seguros para los gatos. Por otro lado, debemos evitar darles objetos que contengan aluminio o pintura que se pueda descamar y ser ingerida.
Artículos domésticos que usar como mordedores para gatos
Algunos de los objetos que puedes usar para crear juguetes son:
- Calcetines viejos,
- camisetas,
- manoplas,
- cordones,
- rollos de cartón (del papel de cocina o de baño), y
- bolsas de papel.
Si eras del club Art Attack y te consideras un manitas, ¡estos proyectos DIY te encantarán!
Calcetín con Catnip
Uno de los juguetes más sencillos de hacer es un calcetín relleno de catnip (también conocido como hierba gatera).
Materiales necesarios
- Calcetín viejo o sin usar
- Catnip fresco
Pasos
1) Tomar un calcetín (que esté limpio y bien lavado).
2) Introducir en él un poco de catnip recién abierto.
3) Atar un nudo fuerte, ¡y listo!
Rollos de cartón
Un juguete muy simple que pirra a muchos gatos son los que están fabricados con rollos de cartón.
Materiales necesarios
- Rollos de cartón (de cocina o baño)
- Tijeras
Pasos
1) Coge el rollo de cartón ya gastado. Asegúrate de que no está sucio o le quedan restos de papel.
2) Córtalo en dos –en tres si se trata de un rollo de cocina–. En los extremos, hazles cortes paralelos en los extremos, para que cuando los abras hacia afuera, parezca una flor.
3) Déjalo en el suelo y mira cómo le encanta a tu gato. ¡Va a estar horas entretenido jugando con él por el suelo!
Bolsas de papel
Lo mejor de este proyecto es que apenas tienes que hacer nada, ya te han dado la bolsa en alguna tienda.
Antes de poner la bolsa de papel a disposición de tu michi, recuerda que tienes que cortar las asas. Esto es muy importante, pues así evitas el riesgo de estrangulamiento si el gato se engancha y no sabe zafarse.
Pon la bolsa de costado en el suelo y cronometrador cuánto tarda tu gato en meterse dentro. Ya tienes dos proyectos en uno: cueva donde esconderse y mordedor que hacer trizas.
Cajas de cartón
Al igual que con las bolsas de papel, las cajas de cartón no tienen ningún misterio. Cada vez que llegue un envío a casa, aprovecha para darle una alegría a tu gato y pon a su disposición la caja en la que venía el paquete.
Recuerda quitar las pegatinas y la cinta de embalaje que puedan ingerir los gatos, por la presencia de pegamento. Si la caja es industrial y trae grapas al fondo, descártala también.
Poner una o dos cajas al alcance de tus gatos les dará un escondite donde pasar el rato, echar la siesta, o aprovechar para jugar a los fortines entre ellos. Además, morderán los bordes para entretenerse. Aunque luego parezca que han tirado confetti en el salón, las cajas de cartón son fantásticos mordedores, y no cuestan dinero. Solo recuerda renovarle las cajas cada vez que recibas un paquete nuevo. Así le darás un poco de innovación al entorno donde habitan tus gatos.
