Todos los días se aprende algo nuevo,y aunque creemos que ya lo sabemos todo sobre los gatos, siempre hay algo que se nos escapa. ¿Crees que estás haciendo todo bien en cuanto al arenero se refiere? Aquí te dejamos una lista con los fallos que cometemos sin darnos cuenta:
Es una caja de arena demasiado pequeña
Que sí, que no hay apenas espacio en casa. Tu propio cuarto de baño es minúsculo. Pero si quieres que tu michi se sienta cómodo en el arenero, este debe aumentar conforme crece él también. Por tanto, te aconsejamos que no guardes mucho tiempo el primer arenero para gatitos que tuvo cuando llegó a casa, pues seguramente se le ha quedado chico.
Lo recomendable es que el arenero mida 1,5 veces la longitud del gato (de cabeza a culete). De ancho, deben ser suficientemente espaciosa como para que el gato pueda darse la vuelta y girar dentro de ella con holgura. Así, te asegurarás de que entierra bien sus cositas y no se sale del arenero sin querer.
Poner el arenero cerca del agua y la comida
Alguna vez te han sentado cerca de los baños de un restaurante, ¿verdad? Seguro que no te gustó nada la experiencia. A los michos les pasa lo mismo. Es por esto que el fengshui y las otras ramas del diseño de interiores se las ingenian para alejar lo máximo posible estas habitaciones de las cocinas y comedores. Comer y beber mientras huele a retrete que hay cerca le revuelve el estómago a cualquiera, y tu gato doméstico es incluso más delicado que el humano medio.
Intenta que cada uno de estos elementos (agua, comida, arenero) estén alejados los unos de los otros, como si fueran puntos cardinales dentro de tu hogar.
Cajas arenero insuficientes
La regla de oro es la misma que cuando se hace una paella: un puñado de arroz para cada uno, y otro para la paellera. Aplicado a felinos, esto significa que lo mejor es que haya un arenero por cada gato que hay en la casa, más un arenero extra para las emergencias.
Aunque es comprensible que la limitación de metros cuadrados en el hogar hace muchas veces imposible esto. Tener más de un arenero para gatos supone solo ventajas. Primero, relajará tensiones territoriales entre felinos que no se llevan bien, pues cada uno tendrá una caja de arena, en vez de compartir un elemento tan íntimo y delicado.
Por otro lado, podrás supervisar la salud de cada gato si usan areneros distintos. Discernir problemas individuales será más sencillo si sabemos a qué gato pertenecen los pipís y cacas que estamos limpiando. Así, podremos acudir antes al veterinario si vemos de forma clara algún cambio en la salud de nuestro gato.
Teniendo en cuenta la disposición de la casa, es útil tener otro arenero de emergencia en un punto distinto de la casa. Si, por ejemplo, los dos areneros están en el baño y vienen visitas, corremos el riesgo de que un invitado cierre la puerta sin querer tras usar el inodoro. Esto cortará el acceso de tus pobres mascotas hasta que uno de los humanos de la unidad doméstica se percate y vuelva a abrir la puerta. Por eso, recomendamos que haya un último arenero extra en otro punto del hogar, aunque esté en un sitio que no le haga del todo gracia a tu gato. Incluso si no lo usan a menudo, es mejor tenerlo por si sucede una emergencia.
Arena insuficiente
Lo sabemos, la arena de gato es voluminosa y suele pesar mucho. A todos nos ha dado pereza alguna vez tener que cargar con ella desde la tienda. Desgraciadamente, esto significa que a veces le ponemos menos arena de la que debiéramos a nuestros michis, o no se la reponemos a medida que vamos retirando la que se ensucia.
Aunque creamos que a los gatos no les importa tener poca arena, sí les molesta. Los felinos son animales pulcros, alabados por su higiene hasta en las religiones más estrictas. Tienen la necesidad biológica de enterrar sus deposiciones en profundidad para no dejar rastro. Por eso, no tener suficiente arena para ocultarlas en cautividad les produce ansiedad.
De media, todos los fabricantes de arena aconsejan poner una capa de 4-7 cm de grosor en el arenero. Así, el gato tendrá suficiente material para escarbar y tapar sus necesidades.
Si ves que se ten hace agobiante comprar cada dos por tres arena para los gatos, o tienes muchos michis en tu hogar, una solución sería pedir la arena de gato por internet y que te la traigan a casa. También podrías plantearte ir a la tienda de animales con un carrito de la compra, para así hacer más liviano el transporte de vuelta a casa.
No adaptar la caja a medida que tu gato crece
A lo largo de los años, las necesidades de tu michi irán cambiando. No es lo mismo tener un gatito de escasos meses, que un gato adulto de 6kg, que un gato ancianito con artritis y movilidad reducida. Es un error pensar que vamos a usar la misma caja arenero durante toda la vida de nuestra mascota.
Tanto en su juventud como en su vejez, los gatos necesitarán areneros con una entrada baja, además de una arena de material suave y blando para sus patitas. Por eso, lo más indicado será una bandeja adaptada con paredes bajas. Un gato adulto, por otro lado, necesitará una caja arenero espaciosa en la que poder moverse y escarbar.
Usar un plástico en el fondo del arenero
Aunque existen productos dedicados para este fin, las bolsas de basura no son aptas para este propósito. Estas bolsas suelen estar hechas de polietileno (PE), y no son eficaces ante las garras y los orines de los gatos. No solo no nos ahorrarán trabajo a la hora de limpiar el arenero, sino que entorpecerán la absorción de la humedad y harán que huela peor.
Aún así, son una opción para personas con discapacidades físicas que tienen dificultades a la hora de limpiar el arenero de forma tradicional. Recomendamos analizar las bolsas para arenero que hay en el mercado y comprar las más resistentes. También es importante analizar el comportamiento del gato alrededor del arenero, y ver cómo la percibe, pues mucho felinos pueden acabar evitando usar la caja de arena al odiar la sensación del plástico.
¿Qué te parece? ¿Habías tenido en cuenta todos estos factores? Esperamos que te haya sido de ayuda este artículo. Si quieres aprender más sobre accesorios de gatos, ¡te invitamos a seguir navegando por la web!