En casa tenemos un auténtico problema cuando llegamos de la compra. Es bastante normal que tus michis se pongan a husmear la compra del supermercado por pura curiosidad. Sin embargo, lo que hace nuestro gato es bastante problemático, y es la semilla que nos ha animado a escribir este artículo. Cárter no solo se limita a curiosear las bolsas de la compra mientras que vamos guardando cada cosa en su sitio, sino que suele ir directo a la bolsa en la que se encuentra el pan de molde. Luego, la abre por la mitad a mordiscos y se come lo que puede hasta que lo pillamos.
Nuestra pregunta había sido siempre la misma. ¿Desde cuándo los gatos comen pan? Pues bien, Cárter no es un caso especial, pues son muchos los gatos que tienen predilección por el pan. A priori, lo más normal es pensar que los gatos no pueden consumir este alimento. Sin embargo, la cosa tiene miga.
¿Puede un gato comer pan?
Vayamos al grano. Sí, pueden comerlo. Pero eso no significa que deban comerlo, pues el pan es un alimento que no le aporta al gato prácticamente nada de lo que necesita en su dieta.
Por norma general, los gatos no suelen hacerle mucho caso al pan. Sin embargo, hay michis que adoran los carbohidratos, y pueden llegar a hacer lo que sea con tal de comerse una galleta o un trozo de pizza. Sí, nuestro gato también entra en este grupo.
¿Es peligroso el pan para los gatos?
Entonces, ¿el pan es seguro para los gatos? Afortunadamente, el pan no representa un gran peligro para los felinos. Así que la respuesta a «¿Pueden los gatos comer pan?» es técnicamente «sí», pero no es realmente recomendable. Los gatos no necesitan pan en su dieta.
Por otro lado, hay panes y panes. Como decimos, el pan no le aporta nada al felino y no debería consumirlo. Además, hay una serie de consideraciones extra que hay que tener en cuenta:
Masa madre cruda. Mantener fuera del alcance de los gatos
La Dra. Heather Loenser, Oficial Veterinaria Senior de la Asociación Americana de Hospitales de Animales, suele advertir sobre los peligros de comer masa de pan cruda o fermentada. «El mayor peligro para los gatos sería comer masa cruda, ya que la fermentación de la levadura en la masa puede hacer que se expanda en el estómago del gato». «Esto puede causar un fuerte dolor abdominal e incluso la perforación del estómago».
La Dra. Loenser agrega que «como el alcohol es un subproducto de la fermentación, el envenenamiento por alcohol es posible. Los síntomas incluirían vómitos, diarrea, letargo, dificultad para caminar o aparentar estar ebrio. Afortunadamente, pocos gatos parecen sentirse atraídos por comer masa de pan cruda — es un problema mucho más común en los perros».
Cuidado con lo que le echas al pan
Una vez tengas claro que tu gato no debería comer pan —aunque pueda llegar a tolerarlo—, toca preguntarse si puede comer el pan combinado con algo. Para no repetirnos, te dejamos unas cuantas lecturas adicionales:
En cualquier caso, debes tener siempre en cuenta que tu gato no puede digerir bien la lactosa. Tampoco puede consumir sal. Además, la cebolla y el ajo, esté fresca o en polvo, pueden matarlo de anemia.
Entonces… ¿Pueden comer pan los gatos?
La Dra. Loenser afirma que, después de 15 años de práctica, nunca ha visto un caso de enfermedad en un gato debido a la ingesta de pan, por lo que no es necesariamente un peligro común. Por lo tanto, evite el pan de ajo y mantenga las salsas de cebolla lejos de cualquier pan que pueda estar al alcance de su gato.
Por ir cerrando y haciendo un resumen, los gatos pueden comer pan, pero no es recomendable. Además, ciertos ingredientes o aditivos pueden resultar peligrosos para su salud. Es mejor ceñirse a una dieta adecuada para felinos y evitar que nuestros amigos peludos se coman nuestras delicias carbohidratadas.