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¿Por qué vomita bolas de pelo mi gato? ¿Cómo puedo evitarlo?

Las bolas de pelo parecen una constante en la vida de los gatos. Son fastidiosas desde todos los puntos de vista: no son agradables de limpiar, y mucho menos de vomitar, si nos guiamos por los sonidos que hacen. Además de hacer pasar un mal rato a nuestro animalito, pueden producir obstrucciones intestinales más graves si no se tratan bien. El saber popular dice que son una dolencia incurable, pero… ¿Hay alguna forma de evitar que nuestro gato sufra estas bolas de pelo?

¿Qué son las bolas de pelo en los gatos?

Las bolas de pelo que producen nuestros gatos no son más que un cúmulo de pelitos que no ha podido digerir. Este fenómeno sucede debido a su tendencia natural de lavarse y acicalarse durante horas. Su lengua con púas tiene la forma perfecta para cepillarse así mismos cada vez que se lamen. Este cepillo biológico que tienen integrados los gatos tiene como desventaja la ingesta de pelos sobrantes.

En general, el sistema digestivo de los gatos está preparado para ingerir estos pelitos que se tragan al lavarse. Muchas veces pasan por todo el sistema digestivo sin mayor problema. Es más, podemos notarlo al limpiar su arenero. Sin embargo, una ingesta excesiva de estos pelos hace que se creen bolas de pelo que no son capaces de pasar al intestino delgado, por lo que las acaban vomitando.

¿Cómo son las bolas de pelo de los gatos?

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A pesar de lo que su nombre indica, las bolas de pelo no tienen forma de bola ni son redondas. Suelen ser alargadas y tubulares, puesto que han pasado por el estrecho esófago de nuestro michi. Las bolas de pelo tienen apariencia de fieltro o felpa, una mata de pelo pegada entre sí, a veces con un poco de comida sin digerir. Suele tener el color del pelaje de nuestro gato, mezclado con un tinte amarillo de los jugos gástricos de su estómago.

Si notas que tu gato vomita mucho su comida, además de bolas de pelo, encuentras indicios de sangre o algún objeto extraño en el vómito (como cordones o juguetes masticados), es primordial que lo lleves cuanto antes al veterinario. Estos vómitos no son ordinarios, sino que revelan un problema intestinal grave que puede matar a tu mascota si no se interviene a tiempo.

¿Cómo evitar que vomite bolas de pelo?

Aunque algunos veterinarios dicen que encontrar una bola de pelos a la semana es normal. Lo cierto es que muchos dueños deseamos minimizar estos problemas intestinales lo máximo posible. Si bien no podemos deshacernos de las bolas de pelo para siempre, sí es verdad que podemos hacer un par de cosas para que sean menos frecuentes:

Cepillando con frecuencia

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Cepillarle es la forma más eficaz y sencilla de acabar con el problema. No debemos cepillar al gato que está sufriendo estos vómitos, sino a todos. Los felinos se acicalan mucho, y este ritual de higiene les sirve también como forma de socializar. Si tienes más de un gato, o incluso también perros, lo más seguro es que se laven los unos a los otros. Esto significa que no solo ingiere su propios pelos al asearse, sino que también puede tragarse pelos de las otras mascotas.

Si tienes un gato o perro de pelo largo, es más probable que el resto de animales de la unidad doméstica padezca trastornos digestivos al acumular bolas de pelo. Para contrarrestar este problema, lo mejor es establecer una rutina de cepillado. Encuentra el momento para pasarle el cepillo a tu gato para peinar su pelaje una o dos veces en semana —más a menudo si es de pelo largo—. Así retirarás pelos que se habían caído o estaban a punto de caerse, antes de que se los trague el gato. Junto con los pelos, te llevarás todo el polvo y suciedad que se le haya pegado a su piel, porque será un baño en seco más eficiente que el que pudiera darse a sí mismo.

No solo es una buena forma de estrechar lazos con tu gato, sino que también relaja. Además, verás una disminución en la cantidad de pelo en suspensión que ronda por tu casa si mantienes una rutina de cepillado constante. ¡Todo ventajas!

Ofreciéndole extracto de malta

El extracto de malta es uno de los mejores complementos que le podemos ofrecer a nuestro gato. Su poder digestivo hace que el felino pueda digerir mejor los pelos que ha tragado y que pasen con facilidad por todo el sistema digestivo.

A muchos gatos les gusta el sabor del extracto de malta y se acercarán contentos a tomarla si se la muestras. Al ser una pasta (de color marrón), suele comercializarse en tubos como los de las pastas dentífricas. La cantidad estándar recomendada es de unos 3 cm, o el equivalente a una almendra. Si a tu gato no le gusta, es común poner un pegote de extracto en su pata. Así la lamerá hasta limpiarse.

La asiduidad con la que le ofrezcas extracto de malta es clave. Si se encuentra bien, con ofrecerle dos veces en semana será suficiente. Si, por el contrario, está sufriendo bolas de pelo, mudando su pelaje o simplemente es de pelo largo, deberás de ofrecerle malta cada dos días o incluso diariamente. Recuerda, es mejor ofrecerle un poquito todos los días que darle una gran cantidad de malta de una sentada.

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Conclusión

Aunque las bolas de pelo esporádicas son algo normal en gatos, lo mejor es seguir estos consejos día a día para mejorar la digestión de nuestra mascota. Si tu gato ha empezado a vomitar estas bolas de la noche a la mañana, lo mejor será acudir al veterinario. Un profesional podrá asegurarse de que se trata de bolas de pelo y no de una obstrucción intestinal grave, por lo que sabrá qué hacer exactamente para curar a tu michi.

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