Ficha Técnica
- Raza: Bengalí
- Otros nombres: Bengala
- Otros idiomas: Bengal Cat
- Origen: Estados Unidos
- Altura: 23-28 centímetros
- Peso: 3,4-5,5 kilogramos
- Esperanza de vida: 12-15 años
- Temperamento: Sociable
- Inteligencia: Alta
- Actividad: Alta
- Bueno con: Niños, Familias, Perros y Otros Gatos.
- Juguetonería: Alta
- Longitud del pelo: Corto
- Tipo de muda: Normal
- Color del pelo:
- Patrón del pelo:
- Otras cualidades:
Historia del gato Bengalí
Los bengalíes son una raza de gatos relativamente nueva y moderna. Su origen se remonta al año 1963, cuando una criadora de California llamada Jean Mill realizó un cruce entre una gata leopardo asiático salvaje y un gato doméstico de pelo corto. Lo hizo aparentemente sin darse cuenta, ya que, a diferencia de hoy, en aquella época (años 50 y 60), se podían comprar gatos salvajes en las tiendas de animales, algo que hoy sería impensable.
Un poco después de todo esta historia de la criadora Jean Mill,
un científico llamado Dr. Willard Centerwall hacía lo mismo en su laboratorio de la Universidad de Loyola. En los años 70, el Dr. Centerwall criaba gatitos de leopardo con gatos domésticos para estudiar su genética. Tampoco lo hacía por estética, sino para estudiar por qué las crías de gatos leopardo salvajes tenían cierta inmunidad a la leucemia felina.
Cuando el doctor dio por concluido su estudio, algunos de los gatitos híbridos del experimento acabaron en manos de Jean Mill. Fue entonces cuando la criadora se propuso elaborar un plan de crianza para crear una raza nueva que tuviera el pelaje impresionante y brillante de un leopardo, con su patrón moteado y su carácter imponente con la docilidad de un gato doméstico.
Las tres primeras generaciones de gato bengalí no fueron reconocidas por las distintas organizaciones felinas, ya que no se consideraron puras ni aptas para la domesticación. No fue hasta la cuarta generación de estos felinos cuando la TICA (Asociación Internacional del Gato) cuando se reconoció la raza como pura e independiente. Otras agrupaciones como
The Cat Fanciers’ Association (que traducido sería Asociación de Aficionados a los Gatos), también conocida como CFA, no reconoció esta raza hasta el año 2016.
Actualmente, todas las asociaciones felinas reconocen al bengalí como una raza pura. Se reconoce totalmente como gato doméstico a nivel legal, pese a que guardan ciertas similitudes con sus antepasados felinos, como la frivolidad. Pese a ello, no se consideran animales peligrosos ni mucho menos.
Apariencia del gato Bengalí
Los gatos bengalí son una raza ágil y generalmente pesan entre 3,5 y 5,5 kilogramos, es decir, como un gato doméstico estándar. Son muy apreciados por su pelaje denso y corto, que es lo que los diferencia de otras razas de felino.
Los bengalíes son una de las únicas razas que pueden tener marcas en forma de roseta que reflejan su ascendencia de leopardo asiático salvaje. Los pelajes manchados o jaspeados también son muy populares entre este linaje. Generalmente, esta raza tiene pelo en tonos marrones, plateados y blanco. El pelaje es extremadamente suave al tacto, y al ser tan corto, basta con un cepillado semanal para retirar las células muertas de la piel del animal.
Los colores de ojos más comunes en los gatos de Bengala son el marrón, el amarillo, el naranja y el verde.
Aunque pesan más o menos lo mismo que un gato doméstico típico, los bengalíes suelen ser más grandes debido a su cuerpo largo y musculoso. Sus largas patas los convierten en excelentes saltadores. Vamos, que si planteas meter uno en casa, debes saber que se va a pasar las tardes subido a estanterías, baldas y todas las encimeras que encuentre en su camino. Son muy aventureros y tienen un espíritu muy activo.
Tipos de gato Bengalí
Etapas del gato Bengalí
- Joven — De 3 meses a 2 años
- Adulto — A partir de los 2 años
- Senior — A partir de los 8 años
Personalidad del gato Bengalí
Los bengalíes por lo general, pueden parecer animales salvajes, pero en líneas generales, son gatos bastante cariñosos. Al igual que ocurre con otras razas, los gatitos suelen seleccionar a su humano favorito; un miembro en concreto de la familia del que no quieren separarse en absoluto. Son gatos bastante sociables, por lo que no suele haber problemas a la hora de socializarlos en familia. Suelen llevarse bien con otros gatos, perros e incluso niños, pero todo depende del individuo. La clave se encuentra en socializar al animal cuanto antes, es decir, cuanto más pequeño sea el bengalí a la hora de introducirlo en un ambiente de personas y otros animales, mayor será su tolerancia a otros individuos. Si tratamos de presentar una nueva mascota a un bengalí adulto, lo normal es que el animal sienta rechazo, dando por sentado que se está invadiendo su territorio.
Como los bengalíes son una raza inteligente y extremadamente curiosa. Necesitan una estimulación constante para mantener su gran cerebro ocupado. Les encanta jugar con juguetes y, aunque te parezca mentira, les suele gustar el agua. Eso sí, siempre y cuando no los sumerjamos por completo. Muchos bengalíes disfrutan incluso del aire libre. Es el caso del Suki Cat, el bengalí que es famoso en Instagram por viajar por el mundo con su arnés y subir a todo tipo de montañas y hacer todo tipo de aventuras con sus dueños, como bañarse en ríos y lagos. No obstante, si quieres llevarte a tu bengalí de aventuras, debes consultar previamente con tu veterinario para que te recete la medicación adecuada para que tu felino no enferme de parásitos y otros patógenos que pueda encontrar en el exterior.
Los bengalíes también son conocidos por ser habladores con sus dueños. No maúllan en exceso, pero son profesionales a la hora de decirte exactamente lo que necesitan. Serán algo pesados si se encuentran el cuenco de comida vacío o incluso si se aburren en exceso y quieren que juguemos con ellos. No son gatos pasivos que se tumben y pasen horas durmiendo; les encanta dar botes de arriba a abajo, algo obvio si conocemos los orígenes de su raza.
A pesar de esto último, los bengalíes no son gatos especialmente ruidosos. Hacen sus propios ruidos, pero no son gatos muy pesados en este aspecto.
Necesidades del gato Bengalí
El bengalí necesita actividad, o por lo menos, una fuente de distracción para calmar su instinto cazador. Es importante que tengan acceso a una ventana donde puedan ver el exterior, y así observar a personas y otros animales como los pájaros. Puede ser interesante colgar una hamaca de gatos en la ventana para que tu bengalí se distraiga haciendo ruiditos a los pájaros que vea en el exterior mientras se encuentra en un sitio seguro.
Siguiendo con la estimulación, los bengalíes son una raza de gato adecuada para enseñar todo tipo de trucos. Te recomendamos la técnica del clicker, que utiliza el condicionamiento para lograr resultados con mucha rapidez. También puedes probar a dejarle salir a la terraza, pero debes tener mucho cuidado con esto si tu gato no está esterilizado, ya que es muy probable que se escape.
Los gatos de bengala necesitan estar cerca de su familia una vez están socializados. Si pasas mucho tiempo fuera de casa, es recomendable que tu bengalí tenga otro compañero gatuno. De este modo, ambos estarán distraídos y mantendrán despiertos sus instintos juguetones.
Por último, debes saber que los bengalíes son lo suficientemente inteligentes como para «gatificar» tu casa en caso de que no hagas bien los deberes. Por ejemplo, si no tienes un castillo para que trepe y se suba, jugará con tus muebles y estanterías. Deberás tener también cuidado con lo que colocas sobre tus baldas, ya que el pequeño depredador puede poner en peligro tus jarrones, marcos de fotos y figuras de porcelana.
Cuidados del gato Bengalí
Esta raza no requiere especiales cuidados. Son gatos bastante independientes, y su pelo corto les evita muchos problemas. Si tu bengalí convive con otro gato de pelo largo, deberías consultar con tu veterinario si considera necesario que le des malta cada cierto tiempo, ya que los gatos que viven juntos suelen acicalarse entre ellos constantemente.
Volviendo a los bengalíes, será más que suficiente cepillarlos una vez a la semana. A diferencia de otras razas, puedes bañarlos, siempre utilizando un champú apto para gatos y respetando si el animal está receptivo. Utiliza agua templada y haz el proceso con mucha calma para que el gato se sienta seguro. Siempre de forma ocasional, no como parte de una rutina semanal o mensual.
Por último, el cuidado de las uñas y de los dientes es exactamente igual que en otras razas de gato.
Salud, Vida y Enfermedades Frecuentes
La mayoría de bengalíes tienen una esperanza de vida que ronda entre los 9 y los 15 años. Por lo general, es una raza que goza de buena salud, pero antes de lanzarte a hacerte con un animal de esta raza, tienes que conocer bien al criador. Evita totalmente los criaderos ilegales, ya que, además de tratar en malas condiciones a los animales, es muy sencillo que acabemos con un gato enfermo debido a las malas condiciones de crianza.
También hay criaderos serios que abusan de sus sementales y acaban creando camadas enteras de gatitos con problemas genéticos serios que acaban afectando a la salud. Por ello, infórmate bien antes de comprar o adoptar un gato de esta o cualquier otra raza, pues está en tu mano hacer que un animal indefenso sufra. Algunas enfermedades comunes de los bengalíes son las siguientes:
- Alergia a los anestésicos: suelen ser sensibles a estos medicamentos, por lo que hay que estar atentos para que no se hagan daño. La cosa se complica un poco cuando se les practica una cirugía, siendo un momento clave en la vida del gato la esterilización, especialmente en los bengalíes hembra. Una reacción alérgica a medicamentos anestésicos puede provocar una parada cardíaca en el gato. Pese a ello, los veterinarios saben más que de sobra este hecho.
- Enfermedades oculares: los bengalíes pueden sufrir una enfermedad llamada atrofia ocular progresiva, que daña la retina y que puede terminar en ceguera.
- Enfermedades del corazón: la miocardiopatía hipertrófica (o cardiomiopatía hipertrófica) es una enfermedad presente en muchas razas de gato y también es congénita en muchas personas. Se produce normalmente cuando el animal alcanza la etapa final de su vida, y se produce un engrosamiento de las paredes musculares del corazón. Esto puede provocar la aparición de coágulos de sangre e insuficiencia cardíaca, lo que puede acortar la esperanza de vida del animal, especialmente si la enfermedad da la cara cuando el gato es joven.
- Enfermedades urinarias: pueden sufrir cálculos en el riñón y también cistitis idiopática felina.
Curiosidades sobre el Gato Bengalí
- A pesar de los estudios que realizó el Dr. Willard Centerwall, los bengalíes no son inmunes a la leucemia felina. No debemos saltarnos esa vacuna jamás, menos aún si el gato pasa tiempo fuera de casa y tiene acceso a otros animales de su especie. De hecho, estudios recientes han llegado a comprobar que se pueden contagiar de esta enfermedad exactamente igual que otras razas de gato.
- El nombre del bengalí no viene del tigre de bengala, sino del Prionailurus bengalensis, que es como se llama científicamente el gato leopardo asiático, que es una especie salvaje.
- Hasta los años 70, se llamaron «gatos de safari». Finalmente se cambió el nombre haciendo referencia a su antepasado.
- El maullido del gato bengalí es diferente al de otros gatos. A muchas personas le recuerda a un ladrido de perro.
- Durante años, los bengalíes han sido gatos muy codiciados. Una mujer en Londres pagó el equivalente a unos 50.000 euros por hacerse con uno de estos michis. Esto hizo que los bengalíes se empezaran a llamar «los Rolls Royce de los gatos».
- Si planeas tener uno en casa, será mejor que te hagas con un asistente de voz como Alexa para controlar la iluminación, porque estos gatos aprenden rápido a encender y apagar los interruptores de la luz de nuestras casas.