Vamos al grano. No, los felinos no pueden comer ajo ni ningún tipo de alimento que contenga ajo, pues es altamente tóxico. Si tu gato se come algún alimento humano que contenga ajo, podría desarrollar anemia, por lo que deberías contactar con tu veterinario de inmediato.
¿Es el ajo malo para los gatos?

Sí. Los gatos son especialmente susceptibles a los efectos del ajo, incluso más que los perros. Según Genna Mize, técnica veterinaria de VIRBAC, el ajo puede causar trastornos gastrointestinales, pero también puede alterar los glóbulos rojos e interferir con su vital función de transportar oxígeno en el cuerpo. Esto, a menudo, resulta en anemia, una enfermedad potencialmente mortal si no se trata a tiempo.
¿Por qué el ajo produce anemia en los felinos?
La principal propiedad tóxica del ajo es el n-propil disulfuro, que se encuentra en forma activa en todos los vegetales de la familia Allium spp. Entonces, ¿pueden los gatos comer alimentos con ajo? De ninguna manera. No importa si es ajo fresco o cocido, o sal de ajo o polvo, todos son tóxicos para los gatos. De hecho, Mize dice que gramo por gramo, las especias de ajo son más dañinas en pequeñas cantidades en comparación con el ajo fresco porque están más concentradas. Solo diente de ajo puede ser todo lo que se necesita para provocar una enfermedad grave.
Si tienes la intención de darle a tu gato un bocado suculento de salmón, pavo o pollo, asegúrate de que estos alimentos estén bien cocidos sin ningún añadido de ajo. Mejor aún, déjalos completamente sin condimentar, pues muchas especias, e incluso la sal, también son muy nocivas para los gatos.
Más allá de la toxicidad del ajo
El ajo no es el único miembro de la familia Allium potencialmente tóxico para los gatos. También hay que evitar todos estos alimentos en la dieta de un gato:
- Cebolla
- Puerro
- Cebollino o cebollas verdes
- Chalotas
El envenenamiento puede ocurrir por una exposición única a grandes cantidades a estos vegetales, o por exposiciones más pequeñas y crónicas con el tiempo.
Síntomas de intoxicación por ajo en gatos
¿Qué sucede si tu gato come ajo? La respuesta depende. Mize explicó que si el gato consume suficiente ajo para provocar problemas clínicos, es posible que se manifieste un trastorno gastrointestinal transitorio sin signos clínicos graves hasta días después. Esto puede ocurrir cuando los mecanismos compensatorios del cuerpo se han agotado y los cambios en los glóbulos rojos han causado anemia.
De hecho, algunos de los otros síntomas no aparecen hasta cinco días después, lo cual es mucho tiempo para determinar la gravedad de la toxicidad. Los síntomas adicionales incluyen:
- Pérdida de apetito: Los gatos que han consumido ajo pueden experimentar una notable disminución en su apetito. Pueden mostrar desinterés por su comida habitual o incluso por sus golosinas favoritas. Esta es una señal de que algo no está bien y necesita atención inmediata.
- Depresión: Este síntoma puede manifestarse como letargo o falta de interés en actividades que normalmente disfrutarían. El gato puede parecer más retraído o menos interactivo con su entorno y sus dueños.
- Intolerancia al ejercicio: Es posible que observes que tu gato se cansa más rápido de lo habitual, o que evita el ejercicio y el juego. Este es un signo de que el ajo podría estar afectando la capacidad de los glóbulos rojos para transportar oxígeno a los músculos y otros tejidos.
- Aumento de la respiración y la frecuencia cardíaca: Este es otro síntoma relacionado con la alteración del transporte de oxígeno. El gato puede comenzar a respirar más rápido y/o tener un ritmo cardíaco más acelerado en un esfuerzo por compensar la disminución de la capacidad de los glóbulos rojos para transportar oxígeno.
- Encías pálidas: Las encías pálidas pueden ser un indicativo de anemia, que es un efecto secundario potencialmente grave de la ingestión de ajo. Las encías saludables deben ser de color rosa brillante.
- Orina de color rojo a marrón: Esta puede ser una señal de que los glóbulos rojos están siendo dañados y eliminados por el cuerpo, lo que puede resultar en un cambio de color de la orina.
- Debilidad: Es posible que tu gato parezca más débil de lo normal. Puede tener dificultades para levantarse, caminar o saltar. Este es un signo de que el ajo está afectando seriamente su salud.
- Amarillamiento de la piel: Conocido también como ictericia, este síntoma puede indicar problemas hepáticos graves y también es una señal de anemia. El amarillamiento puede ser más fácil de detectar en las encías, el interior de las orejas o los ojos del gato.
Si notas cualquiera de estos síntomas en tu gato después de la ingestión de ajo, es crucial que busques atención veterinaria de inmediato.
Ante cualquier duda, acude al veterinario
Vigila a tu gato de cerca si sospechas que ha ingerido alguna forma de ajo. Si tiene diarrea o vómitos durante más de un día o dos, no esperes a que aparezcan los otros síntomas. Ve a que lo examinen de inmediato.
Si te lo preguntas, no existe un tratamiento casero, y a menos que tu gato haya consumido el producto muy recientemente, el cuidado generalmente es de apoyo, dice la experta veterinaria.
¿Qué hacer si tu gato come ajo?
Si sabes que tu gato ha comido ajo y solo han pasado un par de horas antes de la visita al veterinario, Mize dice que lo primero que hará el equipo clínico será inducir el vómito para promover la descontaminación.
«Por lo demás, el cuidado es de apoyo y puede incluir líquidos, medicamentos antieméticos, antioxidantes, etc. En casos graves, puede ser necesaria una transfusión de sangre», dice. Agrega que las constantes vitales de tu gato se controlarán durante su estancia, y la duración del tratamiento dependerá de la gravedad de su enfermedad.
¿Cómo puedes ayudar? Llega preparado con un informe detallado de los comportamientos y síntomas que has observado en casa, lo que tu gato podría haber comido que contenía ajo, y el cronograma de cuándo ocurrió el consumo o la exposición a él.