Inicio » Salud y Bienestar » ¿Entienden los gatos la diferencia entre el bien y el mal?

¿Entienden los gatos la diferencia entre el bien y el mal?

Los gatos son mascotas fascinantes. Tienen personalidades únicas y a menudo parecen hacer lo que quieren. Pero, ¿realmente distinguen la diferencia entre el bien y el mal? ¿Son capaces de sentir culpa o remordimiento? Vamos a analizar el comportamiento felino para responder a estas preguntas.

Los gatos no tienen un sentido moral de lo correcto o incorrecto

Los gatos no tienen un concepto desarrollado de moralidad. No entienden que tirar cosas al suelo o arañar muebles está mal. Simplemente, actúan por instinto, sin pensar en las consecuencias.

Sin embargo, los gatos sí aprenden a asociar ciertas acciones con reacciones negativas de sus dueños. Por ejemplo, si tiran un jarrón al suelo y el dueño se cabrea, entienden que esa acción provocó una reacción desagradable. Y esto nos lleva a un segundo punto bastante obvio, tal y como verás a continuación.

Los gatos detectan cuando su dueño está enfadado

Aunque no tengan sentido de la moral, los gatos son muy perceptivos con las emociones humanas. Prestan mucha atención a expresiones faciales, lenguaje corporal y tonos de voz.

Los gatos saben cuando su dueño está enfadado por cambios en la actitud y el comportamiento. Si el dueño frunce el ceño, alza la voz o ignora al gato, este entiende rápidamente que algo anda mal.

Aunque… los gatos no sienten culpa por hacernos daño

Cuando tu gato te araña o muerde, no creas que después se siente culpable o arrepentido. Los gatos no tienen esa capacidad para la culpa o el remordimiento como los humanos. Si te lastimaron, fue un acto instintivo en respuesta a algún estímulo, no un acto premeditado con intención de dañarte.

Así que no pienses que tu minino se está «disculpando» o buscando tu perdón cuando luego se acurruca contigo mimoso. En realidad, lo que sucede es que tu gato notó tu cambio de ánimo después del incidente. Detectó que estás enfadado o molesto por la reacción involuntaria que tuvo.

Entonces, motivado por su instinto natural de preservar la relación contigo, intenta calmar tu enfado y apaciguar tu malestar con ronroneos, frotándose contra tus piernas y dándote caricias. No lo hace por un sentimiento de culpa o arrepentimiento como lo haría un humano, sino simplemente para restablecer el vínculo contigo que percibe está dañado.

Tu gato sí que intentará reconciliarse contigo

trucos adiestrar gato

Aunque no sientan culpa, los gatos valoran la armonía con sus dueños. Si detectan enojo o tensión después de un incidente, buscarán reconciliarse.

Los gatos tratan de calmar los ánimos, acurrucándose, ronroneando o frotándose contra nosotros. No lo hacen por remordimiento, sino por instinto de preservar la relación con sus cuidadores.

¿Tu gato se ha enfadado contigo? Su cabreo durará poco. Dale tiempo

ducha gato casa

Los gatos tienen una memoria principalmente a corto plazo, por lo que no suelen guardar rencor por acciones negativas aisladas. Varios estudios han demostrado que los gatos tienden a olvidar incidentes puntuales que los molestaron después de unas 16 horas aproximadamente.

Por ejemplo, si accidentalmente le pisas la cola al gato una vez, es probable que a la mañana siguiente ya ni recuerde lo sucedido y su comportamiento contigo sea totalmente normal. Los gatos no memorizan agravios por mucho tiempo.

Sin embargo, esto no significa que su memoria sea limitada. Los gatos poseen también memoria asociativa a largo plazo, por lo que sí recordarán patrones de maltrato o abuso si se repiten de forma constante.

Un dueño que grita, golpea o ignora al gato de manera reiterada lo tendrá realmente complicado para que el animal no le guarde rencor. Dicho gato desarrollará desconfianza y temor duraderos. Aprenderá a evitar y temer a esa persona que repetidamente le causa daño o estrés.

Por lo tanto, aunque los gatos perdonan rápidamente incidentes aislados, nunca olvidan un historial de malos tratos. Su memoria asociativa registra quiénes representan una amenaza continua para su bienestar. Así que si quieres tener una buena relación con tu gato, trátalo con respeto y evita lastimarlo. Un par de errores ocasionales se olvidarán, pero la crueldad repetida generará desconfianza permanente.

Cómo hacer las paces con un gato enfadado

Todos los dueños de gatos cometemos algún error que molesta o estresa a nuestra mascota felina. Quizás le gritamos por arañar el sofá o le hacemos daño por accidente. Cuando nuestro enfado o frustración hace que tratemos mal a nuestro minino, es importante reconciliarnos apropiadamente con él después. Te damos algunos consejos para recuperar la confianza de tu gato:

  • Dale su espacio inicialmente para que se calme solo. Perseguirlo cuando todavía está estresado solo empeorará la situación. Deja que se relaje antes de interactuar.
  • Háblale con voz suave y calmada cuando se acerque. Evita gritos o movimientos bruscos que lo asusten más. Parpadea lentamente para mostrarle que no hay peligro.
  • Premia su acercamiento positivo con caricias relajadas, palabras cariñosas y algunas golosinas. Restaura el vínculo con interacciones agradables.
  • Juega y acarícialo más, dedícale tiempo de calidad para reforzar la confianza. El contacto positivo borra los malos recuerdos.
  • No lo castigues después pensando que se «vengó». Recuerda, los gatos no actúan por rencor.
  • Lleva la relación a cómo era antes. Los gatos perdonan fácilmente incidentes aislados, así que trata de normalizar la situación.

Siguiendo estos consejos, lograrás reconciliarte rápidamente con tu gato después de un error puntual de tu parte. Recuerda tenerle más paciencia y controlar tus impulsos negativos.