Aunque de primeras nos eche para atrás el prospecto de tener un gato con falta de audición, no debemos sentirnos intimidados. Como todo en esta vida, tener un michi sordo como una tapia puede hasta tener ventajas; entre ellas, que no salga huyendo despavorido al oír que encendemos la aspiradora o el secador de pelo.
Si te acabas de dar cuenta de que tu gato no responde cuando lo llamas, o por el contrario, estás pensando en adoptar uno que ya sabes que es sordo, en este artículo te daremos varios consejos sobre cómo convivir con felinos que tienen este tipo de discapacidad.
Muchos mimos y cariñitos
La única diferencia entre un gato común y uno sordo, es que cuando le hables pasará de ti porque de verdad no te escucha. Dado que decirle las ñoñerías típicas de un dueño de mascota no darán su fruto, deberemos trasladar este flujo de amor a un campo más táctil. Es decir, deberemos mostrarles nuestro cariño a través de mimos y caricias.
Si tu gato no es muy pegajoso o todavía no ha tomado confianza contigo, una buena forma de estrechar lazos es teniendo una rutina de cepillado diaria. Este hábito, que imita las técnicas de acicalamiento mutuo dentro del mundo felino, será ideal para que os acostumbréis el uno al otro. Además, parecerá sacado de la peluquería de lo bien peinado que estará. Si ves que tu gato tampoco está por la labor de acercarse a las púas, te aconsejamos que leas nuestro artículo sobre cómo cepillar a tu michi.
Lenguaje de signos
Aunque parezca pasmoso, los gatos sí son capaces de aprender lenguaje de signos, tanto comprenderlos como gesticularlos ellos mismos con la patita. Hay constancia de casos en los que la sordera la padece el dueño y el propio gato se acostumbra a llamarle la atención tocándole y a hacer señas.
Te aconsejamos que aprendas algunas de las palabras básicas del lenguaje de signos establecido en tu país. [Suele variar incluso entre países con la misma lengua fonética. Por ejemplo, aunque en Reino Unido y en Estados Unidos se habla el mismo inglés, los lenguajes de signos que se desarrollaron de forma independiente y varían entre sí.] Esto facilitaría el que otras personas pudieran comunicarse con el gato, incluso si más tarde en el transcurso de su vida acabara viviendo con un dueño que también es sordo.
No obstante, no pasa nada por inventar tus propios gestos para hablar con tu mascota sorda. Si necesitas ayuda para ayudarte a asociar señas con acciones, aquí tenemos algunos consejos para enseñar trucos a gatos.
Andar con pies de plomo
No nos referimos al sentido metafórico, sino al literal. Cuando te acerques a un gato sordo mientras está distraído o dormido, lo mejor es asegurarte de ir pisando fuerte para que el michi se percate de tu presencia gracias a las vibraciones de tus pisadas.
Si está en un profundo sueño y no se ha dado cuenta, despiértalo suavemente dando golpecitos cerca de la superficie en la que estén, en vez de tocarlos directamente. Evita sobresaltarlo por todos los medios. Si ves que los golpecitos en la superficie no funcionan, prueba a soplarle ligeramente en el lomo o cerca de la cabecita para avisarle de tu presencia.
Mantenerlos dentro en la casa
Los gatos sordos, si bien pueden tener una vida plena, son animales vulnerables fuera del hogar. La falta de oído agudo, que es el sentido más desarrollado en los felinos, los hacen una presa fácil de muchos factores de riesgo. No sabrán calcular bien si hay tráfico, o si hay depredadores como perros en las inmediaciones, por lo que son más propensos a ser víctimas de atropellos y las fauces caninas. Si se desorienta y pierde, la tarea de búsqueda será incluso más difícil si no puede oír la voz de sus dueños llamándole.
Te aconsejamos encarecidamente que tu gato sordo sea una mascota de interior. Si quieres que se entretenga con el mundo exterior, hazte con un castillo para gatos y una ventana con vistas en la que se puedan apostar para echar el rato. Si de verdad quieres sacarlo, también puedes barajar la posibilidad de pasear con correa.
Horario de comidas
Como todos los felinos, los gatos sordos también son animales de costumbres, por lo que una rutina establecida le sentará bien y le dará seguridad. Mientras que muchos dueños dan por hecho que el gato aparecerá a toda pastilla cuando oigan el pienso cayendo en el comedero, esto no sucederá con un gato sordo.
Atráelos a la cocina y rellena su cuenco delante de él. Así, verán con sus propios ojitos que les has dado de comer. Así no se quedarán esperando y pasando hambre. Con el paso de los días, le pillará el tranquillo a la rutina y sabrá a qué hora esperarte cerca del cuenco.
Cosas a tener en cuenta con un gato sordo
Los gatos sordos no son callados. No por que tu gato sea sordo significa que también es mudo. De hecho, los gatos sordos tienen fama de ser especialmente escandalosos, más que nada porque no tienen noción de los decibelios que manejan.
Los maullidos de un gato sordo tienden a ser elevados, a parte de que suenan un poco desafinados. Sin embargo, esto le da personalidad al gato y, una vez nos acostumbremos a ese maullido tan característico, nos hará quererle más.
Esperamos que te haya gustado este artículo y te haya sido de ayuda. Si quieres leer más sobre la convivencia entre humanos y gatos con discapacidad, te recomendamos que ojees también nuestro artículo sobre felinos con ceguera.
